La colaboración de algunos transeúntes que circulaban frente al templo de la Sagrada Familia de Barcelona permitió ayer a los Mossos d´Esquadra detener a un hombre que, en plena calle, intentó matar a su ex novia.Algunos testigos del suceso aseguraron que el individuo, Jesús María Poncela, de 40 años, amenazó a la mujer antes de sacar un cuchillo de cocina y asestarle varias puñaladas.
«Esta mañana solucionamos el tema», dijo el agresor a su ex novia antes de comenzar su salvajada.
La víctima, que es extranjera, fue atendida por una ambulancia e ingresada en el hospital San Pablo de la Ciudad Condal, donde se encuentra en estado grave, aunque su vida no corre peligro.
Junto con un operario de gas, Wilson, un ecuatoriano residente en Barcelona, impidió que el presunto homicida consumara su crimen. «Ni a un cerdo se le mata de esa manera», dijo.
Junto a estas líneas, el presunto agresor, todavía con las manos manchadas con la sangre de su ex novia, tras ser detenido.
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