José Luis Pascual, director del centro de coordinación del servicio de Teleasistencia de Cruz Roja, explicó a un grupo de periodistas que acompañaban a las ministras Cabrera y Aído en su visita a este centro que "más de 6.000 mujeres víctimas de la violencia de género cuentan con uno de nuestros teléfonos.
Cubrimos Madrid y el norte de España y en 2008 atendimos cerca de 90.000 llamadas".
"A través de este servicio, que funciona las 24 horas, las mujeres están localizadas en todo momento por el centro de atención a través de GPS. Ofrece atención inmediata, acompaña a la mujer amenazada y moviliza los recurso más cercanos en caso de emergencia", añadió Pascual.
La mujer que dispone de este teléfono especial puede activarlo cuando se sienta en peligro sin que el agresor se de cuenta. Al apretar uno de los laterales del aparato, se activa en la modalidad de "manos libres" y la operadora puede escuchar lo que pasa e incluso, explicó Pascual, "en algún caso de rapto ha permitido a la policía localizar al raptor, gracias al GPS".
Las mujeres con orden de protección pueden solicitar este servicio, que está financiado por el Ministerio de Educación, Política Social y Deporte y que es fruto del acuerdo entre el Imserso y la Federación Española de Municipios y Provincias.
Por su parte, Vanesa Díez, psicóloga y una de las supervisoras de este servicio de teleasistencia para mujeres maltratadas resaltó que intentan enviar mensajes positivos a las mujeres, "que dejen de ser víctimas para que afronten su problema y lo resuelvan".
Cuando una mujer pulsa el telefono, en la pantalla de la operadora salen todos sus datos: "su nombre, cuanto hace que sufre malos tratos, si su ex pareja está en la cárcel, cuantos hijos tiene, qué problemas de salud padece y si tiene familiares que pueden ayudarla. Los casos más terribles son los de las mujeres inmigrantes porque están absolutamente solas", narró Díez.
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