5 de diciembre de 2008

La Generalitat ascendió a la funcionaria condenada por ‘mobbing’ y no la expedientó

El conseller del Departament de Política Territorial i Obres Públiques de la Generalitat, Joaquim Nadal, ascendió profesionalmente a la jefa del Servei Territorial de Carreteres de la Generalitat en la demarcación de Lleida, Teresa Casals Escuer, antes de que se sentara en el banquillo de los acusados que posteriormente la condenó por haber hecho mobbing a una funcionaria. Después de que la juez del Juzgado de lo Penal condenase a Casals y la Audiencia de Lleida ratificara la sentencia, que ordena a la Generalitat a indemnizar a la víctima con 63.398, 65 euros, el departament no sólo no ha expedientado a la condenada sino que la ha mantenido en lugar de trabajo, el mismo lugar al que la ascendió.

Casals se sentó el 28 de enero de 2008 en el banquillo de los acusados imputada por ejercer acoso laboral a una trabajadora a su cargo desde 1996 hasta 2005. Teresa Casals fue asistida por una letrada que cobró los honorarios de la propia Generalitat. La víctima tuvo que pagarse su propio abogado.
El 19 de febrero la jueza del Juzgado de lo Penal número 2 condenó a Casals por mobbing, al no estar tipificado como tal la condena fue por coacciones.

La actitud del departament fue emitir un comunicado en que anunciaba que recurriría la sentencia. El 21 de octubre la Audiencia de Lleida ratificó la condena muy a pesar del recurso presentado por Política Territorial.

Teresa Casals en enero de 2007 fue ascendida a responsable del area de asesoramiento jurídico y legal de la Autoritat Territorial de la Mobilitat de l’Àrea de Lleida. Un representante del departament cuestionó ayer a este rotativo que Casals hubiera sido ascendida. Anteriormente era jefa del Servei Territorial de Carreteres de la Generalitat en la demarcación de Lleida donde además de estar en una graduación inferior cobraba menos de lo que cobra en la actualidad. La única respuesta del representante del departament fue: “No porque ahora cobre más que antes, significa que la hayan ascendido”.

Por otro lado el mismo representante aseguró a este rotativo que Casals fue condenado y el departament no tiene porque aplicar “ningún tipo de castigo sobre Tersa Casals”.

La ley 7/2007 de 12 de abril del Estatut bàsic de l’empleat públic (BOE 89, de 13-4-2007) en el artículo 95 en su apartado 2 considera que son faltas muy graves “toda actuación que suponga discriminación por razón de origen racial o étnico, religión o convicciones, discapacidad, edad o orientación sexual, lengua, opinión, lugar de nacimiento o vecindad, sexo o cualquier otra condición o circunstancia personal o social, así como la persecución por razón de origen racial o étnico, religioso o convinciones, discapacidad, edad o orientación sexual y la persecución moral, sexual y por razón de sexo”.

Si las conductas por las que Casals fue condenada no se enmarcara dentro de alguna de estas descripciones, también se considera falta grave “la persecución laboral”.

La sanciones que establece la misma ley para las faltas van desde la advertencia, pasando por el demérito, supensión de funciones, despido disciplinario hasta la separación del servicio de los funcionarios. La Audiencia de Lleida aseguró: “Es claro que la conducta de la imputada ha excedido con mucho de lo aceptable laboral y personalmente en una conducta dirigida a hostigar a la otra persona.
Una cosa es la rigurosidad en el desempeño de un cargo de responsabilidad y otra convertir la insistencia en una conducta de acoso, con desprecio de la dignidad y voluntad de la otra persona”.

Alfonso L. Congostrina
www.lamanyana.es

El servicio jurídico y psicológico de Ermua ha atendido este año 132 consultas

El Área de la Mujer buzoneará información sobre estos apoyos municipales «para que haya un mayor conocimiento sobre ellos»

Los Servicios de Asesoramiento Jurídico y Psicológico del Ayuntamiento de Ermua han registrado un total de 132 consultas en lo que va de año. En 85 ocasiones se utilizó el asesoramiento psicológico y en 47 el jurídico. Estos datos no significan que hayan pasado este número de personas, ya que las consultas se repiten con las mismas personas en ocasiones en caso de ser necesario. Eso sí, no se trata de servicios permanentes, sino que se atienden unas consultas básicas. Los tratamientos largos se derivan a dónde lo requieran.

Desde que el servicio se creara en 2004 se han atendido 184 consultas sobre asesoramiento jurídico, 7 de ellas formuladas por hombres, y ha habido 497 sesiones de apoyo psicológico a 127 mujeres. En el caso del asesoramiento jurídico los temas más habituales son las denuncias, maltratos, procesos de separación y divorcio, petición de justicia gratuita, impago de pensiones, reparto de bienes y derechos de las trabajadoras del hogar, entre otros.
A la hora de analizar las cifras registradas hay que tener en cuenta que la mayoría de las consultas jurídicas son hechas por personas diferentes y un pequeño porcentaje acude más de una vez.

Si se analiza el servicio de apoyo psicológico se encuentran principalmente consultas sobre estrés postraumático por maltrato físico y psicológico, baja autoestima, depresión, problemas de convivencia conyugales, refuerzo de toma de decisiones o acoso. En este apartado es muy habitual que las mujeres acudan más de una vez. La media es de cuatro sesiones por persona.

Estos servicios, que son prestados por profesionales en la Casa de la Mujer de Ermua, están dirigidos a toda la población, no sólo a mujeres. Se accede a ellos mediante una cita previa y una primera entrevista de valoración. Ahora, con motivo de las reivindicaciones internacionales para acabar con la violencia machista, en torno al 25 de noviembre, el Departamento de Igualdad de Ermua ha decidido buzonear en todos los hogares de la localidad un díptico con información sobre estos servicios.

Mejorar el servicio
La concejala del Departamento de Igualdad, Natividad Alonso, ha explicado que «esta campaña de información es para asegurarnos de que haya un mayor conocimiento del servicio, bien para las nuevas vecinas, bien para las personas que ya residen en Ermua y todavía no lo conocen». «Es importante leer la información e informar a las personas que se encuentran en esta situación a dónde dirigirse» insiste Alonso.

Además, y según los responsables de este servicio municipal, para el año próximo se va a realizar un esfuerzo por mejorar estos servicios aumentando el tiempo de asistencia para dar una respuesta más rápida a las consultas que vayan surgiendo.

En este folleto que se buzoneará en los hogares ermuarras también se informará sobre el piso de acogida para mujeres en situaciones de maltrato, que en la actualidad ha sido acondicionado para la acogida de mujeres con discapacidades físicas y sensoriales.

AINHOA LASUEN
www.elcorreodigital.com

El agresor machista envejece

-El maltratador tipo ronda los 40 años
-Se muestra violento ya en el noviazgo o tras la boda
- Víctimas y verdugos pertenecen a cualquier clase social

Hay mujeres víctimas de malos tratos que cuando llegan al centro de recuperación integral que dirige en Madrid Lola Aguilar no levantan la cara para hablar y su hilo de voz apenas se oye. Ahí comienza un programa psicológico, personalizado, para sacar a cada una del laberinto y devolverles una vida independiente. Suelen emplear en ello entre 14 y 24 meses, y el 72% recupera su autonomía y autoestima. Teniendo en cuenta que el promedio de años bajo los malos tratos es de un lustro, casi parece un milagro.

El centro de Madrid fue pionero en España, se fundó en 1991 y partía del trabajo de mujeres, capitaneadas por Ana María Pérez del Campo, desarrollado desde 1974. En los 15 años en que ella lo dirigió (1991-2006), las mujeres atendidas fueron 350. También hubo 484 niños, sus hijos. Durante los primeros años, la edad del maltratador que se registraba en el historial de las mujeres residentes era de 34 años, pero a partir de 2000 es de 41, lo que permite alumbrar la esperanza de que el maltrato remite entre los más jóvenes.

Ellas suelen ser más jóvenes, una media de 34 años, y empezaron su fatal relación cuando rondaban la veintena. Enamoradas, embarazadas, o las dos cosas, iniciaron la convivencia con un maltratador que dio sus primeras señales de serlo apenas casarse (66%) o ya en el noviazgo (25%).

"No hay un perfil de la mujer maltratada, cualquiera puede serlo, sólo hay que dar con un maltratador, da igual la mujer que seas, ellos son seductores natos", afirma Pérez del Campo.
Desechar la idea de un perfil para la mujer maltratada es romper los mitos, uno de los objetivos de este trabajo. Hay en él mujeres con estudios, un 57% de segundo grado y un 15%, universitarias; españolas y extranjeras; empleadas y en paro. Una radiografía tan variada como la que muestran los agresores. El porcentaje más alto entre los registrados en este centro eran albañiles, seguidos de profesiones de seguridad -policías, guardias civiles, militares-.

Después hay un surtido, desde encofradores a un vicecónsul y un consejero de una autonomía. Mecánicos y médicos, concejales y guitarristas, cantantes y directores de cine. De todo.

En un 77% de los casos, las mujeres que han pasado por este centro los denunciaron, y casi en la misma proporción se encontraron con padres que no abonaron la pensión alimenticia que se les impuso. Un 42% inició allí la separación, aunque un 85% de las mujeres siguió sufriendo malos tratos después de separarse, porque muchas de ellas, por varias razones, no perdieron el contacto con sus agresores. Los problemas jurídicos son uno de esos obstáculos. "Es imprescindible", dijo ayer Pérez del Campo, "que se resuelvan cuanto antes las historias judiciales de los delitos, porque si no, no hay manera de recuperar a las mujeres".

Tampoco para los niños es saludable reencontrarse con el maltratador, coincidieron ayer las expertas ante el delegado del Gobierno contra la Violencia de Género, Miguel Lorente. El 100% de los chicos que ingresaron con sus madres "tenía secuelas psíquicas, pero también físicas", aseguró ayer la directora, Lola Aguilar, que es pediatra. Entre las físicas destacó el crecimiento retardado, la falta de control de los esfínteres y una serie de dermatitis y dolores recurrentes asociados al estrés. Lorente dijo que el Gobierno planea una serie de medidas para combatir esta violencia de género entre los menores. El 46% de los actuales maltratadores lo fue de niño, un dato que le lleva a asegurar a Pérez del Campo que hay que romper esa cadena generacional evitándoles la convivencia con el padre agresor.

Afirmaciones como ésa han convertido al centro y a la Federación de Mujeres Separadas y Divorciadas en diana de todo tipo de insultos por teléfono, por correo electrónico, en páginas web y, por último, en cartas anónimas. Ayer mostraron una de ellas. Las lindezas son casi impublicables, pero se insta con toda suerte de violencias a asesinar a más mujeres de las que pierden la vida cada año. "Habría que mataros a palos a todas, o a cuchilladas", "El día más feliz de mi vida fue el 26 de febrero, cuando en un solo día fueron eliminadas cuatro putas, ¡genial!, ¡grandioso!", dicen en mayúsculas; y en todo momento tratan a las mujeres de parásitas y piden el cese de la "violencia feminista". "Mujeres a fregar", llaman.

Por predicar con el ejemplo, Pérez del Campo denunciará a la policía esta situación y pedirá, por primera vez en 17 años, protección para el centro y la federación. Afirma con rotundidad que hay un contramovimiento organizado para impedir que la sociedad se identifique con las víctimas.

Además, Pérez del Campo pidió la colaboración de los hombres contra el "terrorismo de género", como lo llama: "En esta violencia no cabe la neutralidad, hay que estar al lado de las víctimas sin condiciones. Apelo a los hombres y a su militancia activa".

CARMEN MORÁN
www.elpais.com