El Gobierno vasco destinará el 10% de todos los fondos al desarrollo hasta 2011 a programas relacionados con la igualdad en aquellos países de los cuatro continentes más castigados por el subdesarrollo y en los que la mujer se encuentra en una situación más desfavorecida. El Ejecutivo aprobó ayer el Plan Director de Cooperación al Desarrollo para los próximos cuatro años con el siguiente reparto de fondos: Asia se llevará el 7%, África el 25%, América del Sur el 31% y el 37% restante irá a programas en América Central y el Caribe.
El consejero Asuntos Sociales, Javier Madrazo explicó al presentar el plan que, en momentos de crisis como el actual, es necesario reforzar la ayuda a los países en vías de desarrollo. Se trata de fondos responsables para rescatar vidas, agregó, contraponiéndolos a "los recursos que hoy se entregan a la banca privada sin exigir responsabilidades ni condiciones".
En total, el Gobierno ha destinado este año al desarrollo 45 millones de euros, lo que supone un incremento del 15% respecto de 2007 y un 50% más que hace siete años. Asimismo, el plan consolida el compromiso de destinar para 2012 a cooperación el 0,7% del presupuesto total del Ejecutivo.
22 países prioritarios
El documento estratégico aprobado ayer centra las ayudas en las necesidades sociales, la economía popular, el poder local, la desigualdad de la mujer, los derechos humanos y la identidad cultural. Según esas prioridades, concreta sus objetivos en 22 países, teniendo en cuenta si padecen la vulneración grave y generalizada de derechos humanos, si son zonas en conflicto o en situación de emergencia humanitaria, si allí es habitual la presencia de agentes vascos de cooperación, y si son naciones de las que procede un volumen importante de inmigrantes asentados en Euskadi.
Los países seleccionados son Guatemala, Cuba, El Salvador, Nicaragua, México y Honduras, en Centroamérica y el Caribe; Ecuador, Bolivia, Perú, Venezuela, Brasil y Colombia, en América del Sur: la República Árabe Saharaui, Angola, República Democrática del Congo, Ruanda, Burundi, Mozambique, Uganda y Costa de Marfil, en África; e India y Palestina en Asia.
El plan asegura que estos países recibirán un mínimo del 90% de los fondos destinados a cooperación. Pero además precisa que África será destinataria de al menos el 25% de todos los fondos para intentar paliar situaciones de especial pobreza y vulneración de todo tipo de derechos humanos. El objetivo general del plan es "consolidar una cooperación solidaria y de calidad, que contribuya a erradicar las causas de la pobreza estructural", dijo Madrazo.
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